El abadejo es un pescado blanco, curiosamente sin escamas, y con una piel tan fina que no hace falta retirarla para consumirlo.
Su carne es blanca, tersa y firme, con un sabor suave y delicado que gusta a todos los paladares.
En cocina es muy versátil, ya que admite gran variedad de técnicas culinarias: parrilla, papillot, hervido, en salsa… y en nuestra tierra es uno de los protagonistas de las famosas “caldeiradas”.
Curiosidad: algunos ejemplares exhiben temporalmente un color amarillo muy vistoso.
Propiedades nutricionales: Es un pescado magro, bajo en grasas y rico tanto en proteinas como en vitaminas esenciales y yodo
Elvira RM –
En la vida habia escuchado este pescado pero me lo recomendaron, lo compré aquí y esta realmente bueno